Feliz año nuevo y que le den al viejo. Como tanta otra gente, me gusta repasar el año que dejo atrás. Un año difícil para muchos y para mí también. Veamos:
Lo malo:
-El COVID y los políticos, con la excusa del COVID, han hecho mucho daño a la población en general.
-Las ventas de libros, debido al mal estado de la economía, han caído lo indecible.
-El proyecto del gimnasio ha quedado aparcado de forma indefinida.
-Decir que las cosechas de almendra y aceituna han sido malas es quedarse corto.
-Ahora que estoy buscando trabajo, he descubierto la razón de que las empresas no encuentren mano de obra cualificada de mi especialidad: intentan aprovecharse de la situación ofreciendo contratos abusivos por debajo del convenio y los veteranos con experiencia y estudios preferimos cambiar de sector.
-Este año he perdido un buen amigo y no por culpa del COVID. Descansa en paz.
-Apenas he tenido tiempo de presentarme a concursos literarios.
-Solo he tenido tiempo de publicar un libro de los 4, y un relato largo, que tengo terminados a falta de pasar a limpio y mandar a editorial.
-En cuanto a la vida de pareja... ¿Tengo de eso?
Ahora lo bueno:
-Mis hijos no dejan de sorprederme en el buen sentido.
-En la mayoría de certámenes literarios en los que he participado, he quedado finalista.
-Estoy preparando las pruebas para volver a un sector que me gusta mucho.
-Mi forma física es bastante buena.
-La preparación de las pruebas van por buen camino.
-Parece que las musas no me han abandonado.
-Por fin ha nacido la asociación Castell de llibres.
Ojalá tuviera más cosas buenas que decir pero... Así son las cosas y así se las hemos contado. XD
¿Qué tal ha sido vuestro año?
Un abrazo y hasta la próxima entrada, que tengáis un 2022 fabuloso.
